Sexo sin promesas Molina de Segura
Portada Gipuzkoa. Otras chicas: Putas online Barcelos, Citas online Vigo, Contactos eróticos Oleiros
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpeg)
.jpg)
.jpg)
.jpeg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
.jpg)
La relocalización de empresas hoy no es prioridad y en algunos organismos se habla de un concepto, fragmentación, algo que podría estar clausurando la posibilidad de un crecimiento económico mundial. En materia política, esto viene de la mano de un rebrote de los nacionalismos y la xenofobia. Me refiero a la preeminencia de sus valores, instituciones, reglas, preferencias, intereses, acompañado de una sensación de que ese acervo occidental podía universalizarse, en una suerte de proceso natural, expansivo y progresivo, es decir, superador.
Frente a aquel mundo relativamente homogéneo, no fragmentado, que entendíamos que dominaba Occidente y que se iba a seguir desplegando, hoy encontramos cierta confusión, cierta sensación de desconcierto; al menos, insisto y remarco, con nuestros lentes occidentalizados.
Y esto afecta por igual a los Estados Unidos y China. La Guerra Fría fue una disputa integral. Ahora bien, en este orden no hegemónico, lo que se puede advertir es la existencia de un sistema mundial sobrecargado de desencuentros, fricciones, peligros, luchas, disensos y contradicciones. Esto significa que hay un exceso y que no se puede seguir adelante. La opción disponible es reducir o eliminar algunos programas y archivos, lo que permite recuperar el funcionamiento.
Me detengo en una de tantas. Te plegabas a los Estados Unidos o buscabas un contrapeso y eventualmente te juntabas con la Unión Soviética si Washington no te lo impedía con todo su arsenal de medidas directas o clandestinas; la mayoría de ellas coercitivas. Lo que en aquellos años apareció como la Tercera Posición, el No Alineamiento o la neutralidad, era como una tangente que trataba de evitar esas tomas de posición.
En definitiva, un mundo conocido y claro. A diferencia del pasado, el actual actor ascendente, China, no viene con promesas de ideología, viene con billetera; de allí, en parte, la magnitud del desafío que presenta a Occidente. Viene con finanzas. Viene con comercio. Viene con inversiones. Viene con asistencia. Desconocemos muchísimo qué pasa fuera de Occidente.
