Sexo en el convento Cartagena
Se ha encontrado un documento, datado del año , que otorga el beneficio de limpieza de sangre a Pablo García de Santa María y a sus descendientes, tras una milagrosa conversión al habérsele aparecido la Virgen. Otras chicas atractivas: Aventuras discretas Almozara, Sexo sin relaciones Villazón, Sexo en la ducha Marratxí
Teresa de Cartagena fue una escritora y religiosa nacida entre y en Burgos. Formaba parte del seno de una familia de clase alta con diversos miembros relacionados con el obispado de la misma ciudad.
De Teresa de Cartagena se conservan dos tratados de reflexión religiosa escritos en la segunda mitad del siglo XV. El primero, Arboleda de los enfermos , y el segundo, Admiración de las obras de Dios, ambos copiados por Pedro Lópes de Trigo en el año Teresa de Cartagena perteneció a la influyente familia judeo-conversa de los García de Santa María, también conocidos con el antropónimo "de Cartagena". Se ha encontrado un documento, datado del año , que otorga el beneficio de limpieza de sangre a Pablo García de Santa María y a sus descendientes, tras una milagrosa conversión al habérsele aparecido la Virgen.
Parece ser que Pablo convenció a su hermano para que se convirtiera también al cristianismo y, éste adoptó el nombre de Alvar García de Santa María. Alvar es sobre todo conocido por la crónica que empezó a escribir, Crónica de Juan II. De su primer matrimonio, Pablo tuvo una hija y cuatro hijos.
Su hermano, Pedro de Cartagena , sobresalió sobre todo en el campo militar. La imagen alude, indiscutiblemente, a la virginidad de María. De este ambiente familiar se podría deducir que Teresa tuvo acceso a la educación. Ni ella ni ninguna de las otras mujeres de la familia apenas recibieron atención alguna ya que, tanto por su sexo como por su conversión, quedaron en un segundo plano.
No se tienen datos de casamiento ni de hijos. Hasta fecha reciente se había creído que Teresa de Cartagena había ingresado en un convento como consecuencia de la enfermedad que le llevó a la sordera. La escritora nos deja ver en sus textos que padecía sordera y que esta era la causa de la sensación de soledad tanto física como mental.