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Hoy el sector del diamante es una industria muy profesional, pero solía ser una historia bastante diferente. Después de todo, los primeros diamantes no fueron extraídos por excavadoras industriales, sino que generalmente se encontraban por casualidad.
Las piedras se encontraban en lodo de kimberlita a lo largo de los lechos de los ríos. El dominio indio terminó a finales del siglo XIX. Ahí es donde se puede encontrar la mina Kimberley, también conocida como 'The Big Hole'. Esta adquirió su nombre de la misma kimberlita, que protege el diamante contra la lava cuando llega a la superficie. Siberia y Rusia también comenzaron a ser protagonistas en los años cincuenta. La separación de las provincias del norte de Holanda en puso a esa posición de liderazgo bajo presión.
La prevalencia no regresó a la ciudad de diamantes de Amberes hasta los años veinte. El comercio de diamantes de Amberes volvió a la normalidad y no ha dejado de crecer. Los diamantes solían transportarse en tren a Amberes y se despejaban en la oficina de correos de Jezusstraat.
Los empleados de la Oficina del Diamante iban a recoger los primeros envíos a la oficina de correos a pie. En una etapa posterior, los diamantes se recibían en la oficina de correos de Groenplaats en Amberes y se enviaban a la Oficina del Diamante en taxi. La Oficina del Diamante en Pelikaanstraat revisaba y distribuía los diamantes. La sucursal de Amberes X se abrió al lado de la Oficina del Diamante en A partir de ese punto, la verificación de la documentación y los envíos se realizaba en presencia del cliente.
Los envíos de diamantes seguían sellados con cera, representando el sello de la Oficina del Diamante, así como los del cliente o del banco. El despacho de aduanas y la inspección son realizados por la Oficina del Diamante. La aprobación para el comercio de diamantes entre los estados miembros de la UE ya no es necesaria, pero muchos comerciantes todavía organizan que se verifique todo. No es necesario visitar el centro de la ciudad para comprar diamantes en Amberes. Estos diamantes se seleccionan cuidadosamente, para asegurarse de encontrar el diamante ideal.