Aventuras secretas online São José dos Campos
Mockus, A. Más chicas sensacionales: Parejas para sexo Sincelejo, Anunciosex El Prat de Llobregat, Servicio de acompañantes discretos Camas
Este artículo se centra en la figura de Penélope, en tanto tejedora ejemplar de la literatura occidental. Esta figura es erigida por la épica como ostentadora de feminidad, una feminidad reforzada en la tragedia griega. Nos interesa la modelación de Penélope destinada a tejer y ocupada en los quehaceres del tejido para advertir los desdoblamientos ficcionales que garantizan la reproducción de un imaginario de la feminidad, pero, sobre todo, para rastrear en la narrativa reciente de las Américas las alteraciones y recreaciones que nos permitan narrar de otra manera el vínculo entre cuerpos y escritura.
Para tal efecto, dejamos planteado el desplazamiento de una concepción metafórica del texto por una concepción material del tejido. This article focuses on Penelope, usually presented as an exemplary weaver of Western literature. This figure is erected by epic as a display of femininity, a femininity reinforced in Greek tragedy.
We are interested in the modeling of Penelope destined to weave and engaged in weaving tasks to notice the fictional unfolding that guarantees the reproduction of an imaginary of femininity, but, above all, to recognize in the recent narrative of the Americas the alterations and re-creations that allow us to narrate the link between bodies and writing in another way.
For this purpose, we propose the displacement of a metaphorical conception of the text by a material conception of knitting. Penélope es ante todo la tejedora ejemplar de la literatura occidental. Su ejemplaridad radica en un movimiento doble: tejer y destejer. Penélope teje y desteje para retrasar. En esta situación límite, la argucia mantiene a raya la seducción, pero en ella también se inauguran literariamente las manos habilidosas, que sellan el vínculo entre mujeres, tejido y espacio doméstico.
Aquí también hay manos. Son las manos laboriosas de la escritura, podemos decir con Alejandra Castillo. En este ensayo interesa la modelación de Penélope destinada a tejer y ocupada en los quehaceres del tejido para advertir los desdoblamientos ficcionales que garantizan la reproducción de un imaginario específico de la feminidad, pero, sobre todo, para rastrear en la narrativa de las Américas las alteraciones y recreaciones que nos permitan narrar de otra manera ese vínculo entre mujeres y tejido, o, mejor, entre cuerpos y escritura.