Putas en burdeles Louisville
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Jun 17, Artículos 0 comentarios. Parece ser que el término barrelhouse hace honor a los establecimientos que, a manera de local de diversión, instalaban en sus campos de trabajo las compañías que explotaban las industrias de la madera y la trementina a principios del siglo XX y en la zona conocida como Piney Woods, que abarcaba los espacios cubiertos de bosque de los estados de Mississippi, Lousiana, Alabama y Texas; principalmente. Las penosas condiciones de trabajo en estos campos hacían que la tasa de accidentes laborales fuese cinco veces superior a la de la industria del acero, los trabajadores negros se apiñaban en cabañas insalubres y trabajaban en un régimen disciplinario similar al de las prisiones; no faltaban los asesinatos y los empleados eran sometidos a un trato brutal.
A menudo los campos estaban rodeados de alambre de espino para evitar tanto la salida de los trabajadores como la entrada de curiosos y visitas no deseadas. Allí, la compañía vendía licores con el objetivo de proporcionar a los trabajadores un poco de diversión y, de paso, aligerar de sus bolsillos una parte de la escasa paga semanal. Inevitablemente los barrelhouses contaban con un piano instalado por la empresa.
Una de sus principales preocupaciones era hacerse oír por encima del barullo reinante en el local. Había curas, jugadores, buscavidas, chulos baratos, ladrones, putas y un montón de niños. Ambos grupos fusionaban estilos y compartían trabajo, bebida, juerga y enseñanzas en honky tonks y conciertos callejeros.
Técnicamente, el piano es un instrumento que no parece apropiado para el blues. En otros instrumentos como la guitarra el problema se solucionó desarrollando afinaciones alternativas y recurriendo a técnicas como el slide.
De muchos de los hombres que constituyen la primera generación de pianistas barrelhouse sólo conocemos el nombre, la historia no nos ha dejado grabaciones suyas.
